Batería 70 Ah

De los componentes más determinantes, pero frecuentemente infravalorados, de un coche es la batería, en este caso la batería de 70A. Con la tecnología avanzando rapidamente, cada vehículo tiene cada vez más accesorios y opciones y estos, como es de esperar, consumen energía. Este es el motivo por el cual, cuanto más avanza la tecnología, nuestra batería juega un papel esencial para asegurarnos de que disponemos de un coche funcional y siempre efectivo. ¿Pero de qué manera escoger la batería más adecuada para nuestro automóvil?

Si hasta hace unos años la batería del automóvil sólo se usaba para encender el motor, para alumbrar y algunas otras cosas, ahora se necesitan para todos los sistemas eléctricos de seguridad, para los elevalunas y los techos corredizos, para las radios de los vehículos, para el Start&Stop, para el aire acondicionado, para la toma de corriente y mucho más.

Por eso es importante aprender a escoger la batería correcta para tu coche en caso de necesitar cambiar la que montaba. Así que veamos ahora las variables a partir de los cuales se puede evaluar la elección de la nueva batería.

Elegir la batería de coche mejor: por marca

Dada la extrema relevancia de la batería tanto para el buen funcionamiento del coche como para la seguridad del mismo y de sus ocupantes, es sumamente importante usar una batería de una marca conocida y no demasiada "competitiva".

Cada vehículo tiene un espacio específico para la batería, que puede albergar baterías de ciertos tamaños. Si la batería es más pequeña, se moverá en del hueco (y seguramente se trate de una batería más pequeña que la previa); si es de mayor tamaño, no entrará en el hueco de la batería o generará problemas al interferir con el resto de partes fijas o móviles del automóvil.

Seleccionar la batería del coche: por tipología

Hay diferentes tipos de baterías. El tipo más habitual es la batería de plomo-ácido, que contiene láminas de plomo y dióxido de plomo en cada una de las celdas, sumergidas en un baño de agua y ácido sulfúrico.

Además, están las llamadas baterías AGM (Absorved Glass Mat) que, en vez de tener una solución electrolítica, utilizan fibras de vidrio en las distintas celdas. Son baterías compactas y resistentes, además de poder garantizar una vida bastante larga sin mantenimiento. Si bien es cierto, el precio de las baterías AGM es mas alto que las normales.

El tercer tipo son las baterías ECM (Ehnanced Cycling Mat) también están disponibles para los coches de ciudad, que no requieren grandes cargas para su mantenimiento.

Un factor determinante que debemos contemplar cuando se escoge una batería es si hay o no un sistema Start&Stop en el coche. Un vehículo equipado con este sistema necesita una batería con placas grandes y más fuertes, para no doblarse bajo la tensión que producen los repetidos arranques.

Cómo elegir la batería del coche: para la intensidad de arranque

Otra variable muy relevante es la conocida "potencia de arranque en frio" (medida en amperios), relativo a la intensidad máxima que puede entregar la batería en un tiempo determinado (normalmente unos 30 segundos) para soportar cargas muy elevadas como las producidas en el arranque del coche.

Que la potencia de arranque sea alta permite que el motor arranque de manera sencilla en temperaturas frías (en condiciones de frío se necesita mayor energía durante más tiempo para poner en marcha el motor), sin que se descargue de forma rápida la batería.

Cómo elegir la batería del coche: por capacidad

Los últimos parámetros a considerar son los relativos a la capacidad de la propia batería. La capacidad de la batería se mide en Amperios/Hora (Ah) e indica el número de Amperios que la batería puede entregar durante una hora antes de descargarse (por ejemplo, una batería de 70 Ah podrá entregar 70 A durante una hora y el doble A durante media hora, etc.). 

La capacidad de la bateria es muy relevante ya que si el sumatorio de los amperios de todos los elementos eléctricos del vehículo en 60 minutos supera los amperios que entrega la capacidad, la batería no será capaz de cargarse y, por el contrario, se descargará muy rápidamente, poniendo en riesgo el funcionamiento de los elementos electrónicos del automóvil.