Batería 62 Ah

Uno de los componentes más importantes, pero a menudo subestimados, de un vehículo es la batería, en este caso la batería de 62A. Con la tecnología avanzando a gran velocidad, cada vehículo es cada vez más rico en accesorios y componentes electrónicos y estos, como es de esperar, gastan energía. Por eso, cuanto más le electrónica, nuestra batería juega un papel fundamental para garantizarnos de que tenemos un coche funcional y siempre efectivo. ¿Pero de qué manera seleccionar la batería más adecuada para nuestro vehículo?

Hasta hace un tiempo la batería del automóvil sólo se usaba para poner en marcha el motor, para la iluminación y algunas otras cosas, actualmente se usa en todos los sistemas electrónicos de seguridad, para los elevalunas y los techos corredizos, para las radios de los vehículos, para el sistema Start&Stop, para el aire acondicionado, para la enchufe de corriente...

Por este motivo es relevante aprender a seleccionar la batería válida para tu coche si tienes que reemplazar la que montaba. Así que veamos ahora los parámetros en base a los cuales podemos evaluar la selección de la nueva batería.

Cómo elegir la batería de coche mejor: por marca

Dada la gran relevancia de la batería tanto para el correcto funcionamiento del vehículo como en cuestiones de seguridad del mismo y de sus ocupantes, es sumamente importante montar una batería de un fabricante conocido y no demasiada "competitiva".

Cada vehículo tiene un compartimento específico para la batería, que puede albergar baterías de ciertas medidas. Si la batería es de menos medida, se moverá en del compartimento (y seguramente sea una batería de menos amperaje que la previa); si es más grande, no entrará en el compartimento de la batería o generará problemas al interferir con el resto de elementos del automóvil.

Cómo elegir la batería de nuestro vehículo: por tipo

Existen diversos tipos de baterías. El tipo más común es la batería de plomo-ácido, equipada con láminas de plomo y dióxido de plomo para cadacelda, sumergidas en un baño de ácido sulfúrico y agua.

También están las baterías AGM (Absorved Glass Mat) que, utilizan fibras de vidrio en sus celdas en lugar de una solución líquida. Estas baterías son muy resistentes y muy compactas, además de poder garantizar una vida bastante larga sin mantenimiento. Si bien es cierto, el precio de las baterías AGM es mas alto que las normales.

El tercer tipo son las baterías ECM (Ehnanced Cycling Mat) también están disponibles para los vehículos de ciudad, que no necesitan grandes cargas para tenerlas mantenidas.

Otro factor a considerar cuando se elige una batería es si hay o no un sistema Start&Stop en el vehículo. Un vehículo equipado con este sistema requiere una batería con placas de gran tamaño y más fuertes, para no sufran daños bajo la tensión de los arranques repetidos.

Elegir la batería del coche: para la intensidad de arranque

Otra variable muy importante es la conocida "corriente de arranque" (medida en amperios), que corresponde a la intensidad máxima que puede entregar la batería en 30 segundos normalmente, para soportar intensidades muy altas como las generadas por un arrancador.

Que la potencia de arranque sea alta consigue que nuestro motor arranque de manera sencilla a bajas temperaturas (en condiciones de frío se requiere más energía durante más tiempo para arrancar nuestro motor), sin que se agote de forma rápida la batería.

Cómo elegir la batería del coche: por capacidad

El último factor que debemos tener en cuenta son los relativos a la intensidad de la propia batería. La capacidad de una batería se mide en Amperios/Hora (Ah) y muestra la cantidad de amperios que nuestra batería puede dar durante una hora antes de perder la carga (sería el caso, una batería de 62 A podrá entregar 62 A en una hora, el doble amperios durante media hora, etc.). 

La intensidad de la bateria es sumamente relevante porque si el sumatorio de los amperios de todos los dispositivos eléctricos del coche durante una hora supera los amperios que proporciona la intensidad, la batería no será capaz de recargarse y, por por otro lado, perderá la carga muy rápido, arriesgándose a posibles problemas de funcionamiento de los elementos electrónicos del auto.